
Este enfoque, conocido como aprendizaje reforzado, fue el que consiguió que el ordenador AlphaGo, desarrollado por una subsidiaria de Alphabet, DeepMind, dominara el complejísimo juego de mesa Go y venciera a uno de los mejores jugadores humanos del mundo el año pasado. Ahora, el aprendizaje reforzado podría estar a punto de ofrecer una mayor inteligencia más allá de los juegos de mesa. Además de mejorar los coches autónomos, la tecnología puede ayudar a un robot a agarrar objetos que nunca ha visto antes y puede averiguar la configuración óptima para los equipos de centro de datos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario